Cómo incorporar el tahini en tus recetas diarias
Originario del Medio Oriente, el tahini es una pasta elaborada a base de sésamo con un sabor deliciosamente reminiscente a nuez y una textura cremosa similar a la mantequilla de avellanas, con una consistencia uniforme.
Este ingrediente esencial es la base del popular dip o acompañamiento conocido como hummus. Prepararlo es sencillo: basta con mezclar tahini, ajo, jugo de limón fresco, aceite de oliva y especias en un procesador de alimentos. Luego, se diluye con suficiente agua fría hasta alcanzar la consistencia deseada.
El tahini puede disfrutarse en su forma clásica o utilizarse como un aderezo potente para ensaladas, incorporarlo en brownies o pasteles, e incluso rociarlo sobre frutas para darles un toque extra de sabor.
Descubre cómo puedes elevar tus creaciones culinarias a otro nivel, al ser un ingrediente versátil que añade un toque de sabor único a una variedad de platos. Ya sea disfrutándolo en clásicos de la cocina como el hummus o incorporándolo en recetas dulces y saladas. Su sabor y textura hacen que sea una adición deliciosa a la cocina.